intrascendente

 Un doloroso recuerdo que ilumina toda la casa, lleno de abduciones que no permiten un plano claro de lo bueno y lo malo...

Una pérdida que no siento más, una pérdida de algo que no fue mío, un algo que ya no está, un llanto que se despidió sin marcharse, un alguien que tiene que correr para evitar mi recuerdo... un yo que ya no me pertenece. 

Adiós es una palabra corta y fría como una navaja penetrante en la garganta, 5 letras que nunca pensé tener en mi vida por su parte...

"No me hagas daño", palabras y letras que jugaron un papel complaciente con su respuesta, un llanto liturgico, un ademán más para una corona indeleble que cayó al fango... una corona que yo sola le investí.

Acaso será posible que tanto ahora pueda ser tan poco?


 

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